En general, los comerciantes prevén que las ventas sean algo superiores a las de 2014, con una estimación de hasta un 5% de media de incremento.
“Existe cierta sensación de desazón generalizada entre los comerciantes sobre las rebajas, especialmente en el comercio de proximidad, que plantea la necesidad de abrir entre todos la reflexión sobre el presente y futuro de un concepto que tanto costó definir en su momento -las rebajas- y que tanto consumidores como comerciantes siguen buscando”, explica Manuel García-Izquierdo, presidente de CEC.